DEFINICIÓN  -    HISTORIA - EVIDENCIA CIENTÍFICA

Los hospitales psiquiátricos de día se describieron por primera vez en la Unión Soviética en los años treinta donde surgieron como resultado de la escasez de camas. El primer hospital de día norteamericano se abrió en Montreal, Quebec en 1946, también en un intento de reducir la demanda de camas para la hospitalización. En los EE.UU. los hospitales de día se convirtieron en una forma popular de tratamiento para las personas en los años sesenta después de que el Community Mental Health Center Construction Act de 1963 legalizara la necesidad de establecer programas de hospitalización parcial. Desarrollos similares promovieron el crecimiento de los hospitales de día en el Reino Unido en los años sesenta, y en Holanda y Alemania occidental en los años setenta. En los años ochenta, sin embargo, la American Psychiatric Association realizó una investigación que reveló un cierre generalizado de los programas de hospitalización parcial y una tasa baja del crecimiento en los números de pacientes atendidos por tales programas. Varios factores contribuyeron aparentemente a tal disminución. En primer lugar, se supo de las pruebas limitadas para la efectividad y el costo-efectividad de los hospitales de día. En segundo lugar, los hospitales de día se enfrentaron con la competencia de opciones radicales “no institucionales”, como el tratamiento asertivo de las comunidades. En tercer lugar, la confusión sobre la función de los hospitales de día llevó a que se convirtieran en centros de día costosos ya que se saturaron debido a los pacientes ubicados de manera inapropiada y por un largo plazo. A pesar de estos problemas, la presión despiadada sobre los establecimientos de hospitalización resultó en un interés permanente en los hospitales psiquiátricos de día e inspiró el desarrollo de los mismos con un estilo nuevo ayudados por los servicios de extensión, las camas de crisis y los programas de horas prolongadas.(1)

A pesar de que pasaron cincuenta años de investigación, las opiniones permanecen divididas con respecto a la efectividad del costo del tratamiento en hospitales de día. Los que proponen este tipo de tratamiento sostienen que se puede brindar una atención más efectiva en relación con los costos por medio de: la promoción de una recuperación más rápida, un mejoría en el funcionamiento social, una reducción de la carga familiar, una menor duración de la atención hospitalaria, y una reducción de las tasas de recidiva. Sin embargo, los críticos destacan las altas tasas de pacientes perdidos del seguimiento en los estudios de los hospitales de día, y se preguntan si el tratamiento en hospitales de día en realidad “institucionaliza” los pacientes al alentarlos a asistir durante períodos de tiempo demasiados prolongados.(1)

Referencias.

Marshall M, Crowther R, Almaraz-Serrano A, Creed F, Sledge W, Kluiter H, Roberts C, Hill E, Wiersma D. Hospital de día versus ingreso al hospital para los trastornospsiquiátricos agudos. Biblioteca Cochrane Plus. 2008;2.